Los constantes informes de resultados de la DGT dejan latente un terrible ascenso de víctimas en accidentes de tráfico. Una de las principales causas que generan dichos accidentes son conductores ebrios, que por norma general suelen estar involucrados en los mismos.
Son conductores profesionales, aquellas personas que hacen de la conducción su medio de vida, con lo que recorren día a día miles de kilómetros. Es una profesión, no exenta de riesgo y no precisamente por impericia sino por la existencia de otros factores que inciden directamente en su comportamiento.